BUSSANA VECCHIA, IL BORGO DEGLI ARTISTI»

Bussana Vecchia está ubicada en las colinas que dominan San Remo y es uno de los pueblos más misteriosos y fascinantes de la Riviera dei Fiori. Bussana era un pueblo normal hasta el trágico 23 de febrero de 1887, cuando un terremoto lo destruyó, obligando a sus pocos habitantes a dejar sus casas, pasando una temporada en viviendas improvisadas hasta que entre 1889 y 1894 se construyó Bussana Nuova. Durante más de 60 años fue un pueblo fantasma hasta que durante las décadas de 1950-60, un grupo de artistas, fascinados por la belleza del lugar y su potencial, renovaron las casas en ruinas y se establecieron en ellas. Dicho grupo de artistas iba encabezado por Mario Giani, un gran ceramista turinés, conocido por su nombre artístico Clizia. Otro artista importante fue el pintor Gianni Giuffrè quien fue su presidente durante 9 años. Incluso redactaron un estatuto para regular la vida del pueblo. De esta forma, Bussana Vecchia se convirtió en un destino para pintores, escultores, artesanos, músicos y poetas no solo no solo de Italia sino de todo el mundo, quienes restauraron los edificios menos dañados y los hicieron habitables. A finales de la década de 1960, abrió el primer taller, donde se podían comprar obras de artistas. Hoy en día, el pueblo es un verdadero museo al aire libre y es por todo ello que ha recibido el nombre de el «Borgo degli Artisti». El pueblo está habitado todo el año por unas sesenta personas aunque aumenta a unas doscientas en verano.

Los Atelier degli Artisti son la principal atracción de Bussana Vecchia. Se trata de coloridas tiendas donde se puede comprar de todo, desde creaciones artísticas de gran valor hasta objetos artesanales bonitos pero menos originales. En esta población dedicada a los artistas podrás recorrer las galerías de arte, estudios y talleres de artistas y artesanos mientras das un paseo entre casas de piedra con paredes agrietadas donde se encuentran sus estudios de arte, talleres de cerámica, pequeñas galerías y talleres donde aún se elaboran artesanías a mano. No te pierdas un solo rincón porque incluso cada puerta esconde un mundo diferente: esculturas que brotan de las vides, cuadros colgados en paredes húmedas, artistas trabajando con las puertas abiertas y música que se escucha en la calle. Además tienes los pequeños cafés y tabernas que ocupan edificios renovados desde la década de 1970 o incluso podrás sentarte a comer en las mesas de piedra de la Osteria degli Artisti, ubicado en uno de los monumentos históricos del pueblo.

Las ruinas del Castello di Bussana fue construido en el S. XII por los conde de Ventimiglia y es uno de los edificios históricos más importantes de la población. Está ubicado en su parte alta y destruido casi por completo.

La chiesa di Sant’Egidio fue construida en estilo románico entre finales del S. XIV y principios del S. XV y renovada en estilo barroco en 1652. En su interior se refugiaron los habitantes de Bussana durante el terremoto de 1887. El edificio sufrió graves daños y hoy en día se puede visitar solo desde el exterior. La nave central ha sido despejada de escombros y, con el tiempo, ha quedado cubierta de hierba y plantas silvestres. Se pueden ver los nichos laterales y las cornisas adornadas con elegantes estucos y decoraciones originales, y admirar de cerca el campanario que, milagrosamente intacto, se ha convertido en el símbolo de la población. Dejó solo intactos los arcos de las capillas, las columnas laterales y parte de los muros exteriores.

El Giardino entre las ruinas es otro bello rincón de Bussana que se ha convertido en una atracción turística. Fue creado por Luisa Bistolfi, quien llegó a la población a principios de los años 1970. Este pequeño y encantador jardín botánico privado se encuentra en la parte alta del pueblo y está salpicado de geranios y una variedad de especies florales. Se distribuye en varios niveles, cada uno repleto de rincones románticos y espléndidas vistas de la ciudad; la terraza más alta ofrece una hermosa vista del campanario de la chiesa di Sant’Egidio. Se requiere una pequeña donación para visitar el jardín.

No te olvides del Oratorio di San Giovanni Battista que también se encuentra sin techo y que está cubierto por la hiedra.

La Osteria degli Artisti es el lugar de encuentro por excelencia de los artistas que residen en la Bussana Vecchia. Es aquí donde se reúnen para charlar y es el primer restaurante abierto después de la repoblación del pueblo. Podrás disfrutar durante los días soleados, de las vistas al mar azul desde la espléndida terraza. También podrás disfrutar de una cena con música en vivo.

Il Plastico Ferroviario es un ferrocarril en miniatura compuesto por 350 m de vías que recorre tres salas interconectadas (en realidad es la maqueta de trenes más grande de Italia) que está construido íntegramente por una asociación de entusiastas. Reproduce una imagen muy retro y algo romántica de las estaciones costeras de Liguria que, lamentablemente, ya no existen. Lo peculiar es que hay un desnivel de un metro entre ambos espacios, y para salvarlo, se construyeron dos espirales de siete pisos que los trenes deben recorrer para ir de un lugar a otro. La entrada es gratuita.

La Spiaggia di Bussana Mare está muy cerca la población, un simple paseo romántico, concretamente, la zona costera de Bussana Nuova, una estrecha franja de guijarros bañada por el mar azul, con zonas comunes y clubes de playa. Siguiendo hacia el este, se llega a Arma di Taggia, un popular balneario en la Riviera di Ponente.

Curiosidades: bajo las casas de Bussana Vecchia yace un laberinto excavado en la roca con 80.000 años de antigüedad, un legado prehistórico que da testimonio de la larga historia de este lugar. El terremoto de 1887 no fue el único, ya que ha habido varios a lo largo del tiempo, pero sí el más devastador.

Recomendaciones para fotografiar: cualquier rincón o callejuela será perfecta para una buena fotografía. Las vistas desde las ruinas del castillo. Entre sus paredes se esconden murales coloridos, una pintura de ensueño, una silla colorida colgada en la pared, un objeto cotidiano transformado en maceta, una estatua enclavada en un tramo de murallas antiguas, y quién sabe qué más… 

Recomendaciones de eventos: al ser un pueblo lleno de artistas, las exposiciones son continuas, se celebran festivales (sobre todo en verano) dedicados al arte, la música y la cultura en general y también conciertos de música clásica, jazz, folclórica y del mundo. Además en primavera y en las cálidas noches de verano, el pueblo cobra vida con representaciones teatrales, exposiciones y música en vivo.

Recomendaciones para comer: el mejor para meterse de lleno en la atmósfera, sin lugar a dudas, es la Osteria degli Artisti.

Platos Recomendados: Bussana Vecchia fue famosa por producir tomates de alta calidad que se exportaban a toda Europa.

Recomendaciones para dormir: podrás descansar en Casa di Ingrida Bussana Vecchia, Hotel Villa La Brise, Casa Tulin Appartamenti, Sanremo Bay Studio, Casa delle Ginestre Bike o en Casa Vacanze il girasole Sanremo en San Remo; en Martina House, Albergo Florida Taggia, Fiori di ulivo o en Casa Mimi en Taggia; en Hotel Ideal, la Maisonnette di Anna, Hotel Vita Serena, Hotel Svizzera, Ponente Blue Appartamenti 1, Ponente Blue Appartamenti 5, Ponente Blue Appartamenti 6, Ponente Blue Appartamenti 8, La Casa di Barbie, Hotel Arma Ristorante o en La Piazzetta en Arma di Taggia.

Recomendaciones para aparcar: no hay parking, lo mejor es dejar el coche fuera de la población.

Recomendaciones para visitar en los alrededores: podrás acercarte a poblaciones como Taggia, Sanremo o San Lorenzo al Mare e incluso ciudades como Imperia o Savona y, por qué no, cruzar la frontera y pasar a Francia para visitar Niza o Mentón.

APRICALE

Apricale es una pueblo medieval que se alza sobre un escarpado espolón rocoso a 273msnm y que está enclavado entre las colinas del oeste de Liguria, concretamente en el Valle di Nervia, además de estar rodeado de olivos centenarios, viñedos y castaños. Su nombre deriva de «Apricus», que significa «expuesto al sol», por lo que no es de extraña que se lo conozca por el nombre de «Borgo del Sole», debido a su favorable exposición y clima templado durante todo el año. Está incluido entre los considerados como «Borghi più belli d’Italia» y además está galardonado con la Bandiera Arancione del Touring Club Italia. Decit también que es una de las conocidas como «Città dell’Olio» y se encuentra justo en la Strada dell’Olio. El Centro Histórico es un conjunto pintoresco y está caracterizado por casas de piedra con portales apuntados encaramadas en la ladera cuyas fachadas están decoradas (al menos algunas de ellas) con frescos de artistas modernos, también verás pequeñas iglesias, arcos y lavaderos, además de un laberinto de calles empedradas y estrechas o los típicos callejones de la Liguria.

La Piazza Torracca es el corazón palpitante (además de la plaza principal) de Apricale y desde aquí se extienden las estrechas calles en círculo, serpenteando por las laderas de la colina sobre la que se alza el pueblo. La plaza está presidida por los dos edificios que son símbolo de la población: la chiesa della Purificazione di Maria Vergine, el Oratorio di San Bartolomeo y el Castello della Lucertola. También podrás admirar en ella la fuente gótica y descansar en sus bancos de piedra.

La chiesa parrocchiale della Purificazione di Maria Vergine es el edificio más importante de Apricale y fue construida en el S. XII con estilo gótico aunque ha sufrido diversas restauraciones con elementos decorativos añadidos y otras ampliaciones hasta 1760, cuando fue modificada a estilo barroco. La última restauración data de 1935 y se centró en la fachada románica. La fachada es de piedra rosa y gris tiene estilo neorrománico. Sus vidrieras representan a los santos Luigi e Sant’Agnese, y el rosetón de mosaico sobre la puerta principal representa la Purificazione di Maria Vergine y la Presentación en el Templo, son particularmente hermosos. Su interior, que consta de tres naves divididas por dos filas de cuatro pilares cada una, está decorado con elementos barrocos, además de frescos de principios del S. XX pintados por Leonida Martini. Por lo curioso que es, destaca la bicicleta fijada al tejado del campanario de la iglesia creada por Sergio Bianco en 2000 y que se llama «La Forza della non gravità». Es sede de una instalación de arte contemporáneo.

El Castello della Lucertola es una fortaleza defensiva encaramada en un espolón rocoso que fue construido en el S. X por orden de los condes de Ventimiglia (posteriormente pasó a ser propiedad de la familia Cassini, quien la transformó en residencia noble, además de la familia Doria) y que está situado cerca de la chiesa della Purificazione di Maria Vergine cuyo campanario formaba parte originalmente del castillo. Se cree que recibe este nombre gracias a su posición, que se asemeja a la de un lagarto tomando el sol. En sus inicios había otra torre, hoy desaparecida. Su interior alberga el Museo di Storia di Apricale, además de refinados muebles y frescos y es incluso sede de eventos culturales como exposiciones de fotografía, pintura y arte. No te pierdas el jardín colgante que tiene vistas a la Piazza Torracca.

El Museo di Storia di Apricale está ubicado en el Castello della Lucertola. Se trata de un pequeño museo local que recorre la historia y las tradiciones del pueblo por las estancias más bonitas del castillo: la Stanza della Contessa della Torre Cristina Bellomo, la Stanza degli Statuti, la Stanza del Risorgimento, il Salone superiore e i sotterranei. También se exponen hallazgos arqueológicos, fotografías y documentos históricos además de reliquias donadas por familias locales. No te pierdas la exposición dedicada a Cristina Anna Bellomo, una de las figuras más famosas del pueblo, o la sala dedicada a los famosos Statuti di Apricale de 1267, que están considerados como los más antiguos de Liguria.

Otras iglesias que ver en Apricale son la chiesa di Santa Maria degli Angeli y la chiesa di Sant’Antonio Abate construida en el S. XIV cuyo interior alberga un políptico renacentista de 1544 que representa la Madonna della Neve. No te pierdas las Cappelle Sacre que están ubicadas en las inmediaciones de la población: en la carretera que lleva a Perinaldo, la Capella di San Vincenzo Ferrer data del S. XVI y fue restaurada en estilo barroco; la Capella di San Martino fue construida en el S. XVI y conserva frescos del S. XVI en el ábside; y la Cappella di San Rocco, situada en la parte norte del pueblo, en el camino que lleva a Pigna.

La chiesa di Santa Maria degli Angeli data aproximadamente del año 1000 aunque no hay información bastante fiable y es una pequeña joya arquitectónica que se encuentra a los pies del pueblo. Su interior, de una sola nave y dividido en tres tramos cerrados por un ábside, alberga un valioso ciclo pictórico: la Incoronazione della Vergine Maria del S. XV, además de otros frescos de los Dottori della chiesa que datan de las primeras décadas del S. XIII, escenas de la vida de Maria, de la Infancia de Jesús y de los Misterior del Rosario, atribuidos a Bartolomeo Asmio y Antonio Semeria. Los frescos fueron restaurados entre 1989 y 1990.

Los Murales di Apricale es una exposición al aire libre de frescos pintados en las fachadas de las casas. Existen alrededor de 50 murales creados por artistas tanto nacionales como internacionales, casi todos de estilo naïf, con colores brillantes, figuras estilizadas y una representación sencilla de la realidad: escenas de la vida campesina, artesanía tradicional en acción, momentos de celebración y personajes locales. Es por todo esto que Apricale es conocido como el «Borgo degli Artisti».

El Monumento al Libro es una obra de los artistas Enzo Pazzagli y Claudio Nobbio, un homenaje de Apricale a la palabra escrita. Se trata de un gran libro con páginas de acero y está ubicado en una plaza del pueblo.

La Casa del Boia era la antigua casa del auténtico verdugo, encargado de decapitar a los condenados. Su existencia está atestiguada por los Statuti di Apricale de 1267. En su torre de piedra, que todavía sigue en pie, se exhibían las cabezas de los ejecutados durante un día.

Curiosidades: Apricale es un pueblo amante de los gatos y encontrarás pintados en los paneles de las puertas y en los buzones, además de todos los felinos reales que te podrás encontrar por las calles. Pero el personaje principal de Apricale es Cristina Anna Bellomo, conocida como la «Condesa della Torre». De origen humilde, dejó su casa para buscar fortuna en Niza, donde conoció y fascinó al conde della Tour, convirtiéndose en su amante y heredando su riqueza. Pero fue conocida, sobre todo, por ser una espía en la corte Romanov, una auténtica Mata Hari. Siempre iba acompañada por María Pizzio, su sobrina. Hay una sala dedicada a la condesa con recuerdos de ella como abanicos, enaguas bordadas, sombrillas y sombreros. 

Recomendaciones para fotografiar: el puente de piedra a la entrada del pueblo es perfecto al atardecer, con vistas a las colinas. La Piazza del Castello, con vistas únicas a los tejados. Cada uno de los 50 murales. En cualquier rincón encontrarás gatos listos para ser fotografiados.

Recomendaciones de eventos: la Festa di San Valentino en febrero; cada verano se celebran Teatro Itinerante, Teatro della Tosse y «le stelle stanno a guardare»; la Sagra della Pansarola se celebra en el segundo domingo de septiembre.  Sin olvidarnos de «Apricale Tango» para los amante de este baile o la Festa dell’olio nuovo.

Recomendaciones para comer: los mejores restaurantes para probar los platos típicos ligures son Ristorante Apricale da Delio, Apricus Osteria & Bar, Ristorante La Favorita, Bar Trattoria «A Ciassa» o Ristorante da Baci.

Platos Recomendados: como entrantes y primeros platos tienes la Torta Verde, una especie de quiche preparada con verduras de temporada, los típicos Barbagiuai (o ravioli del «Barba Giovanni», que son raviolis rellenos de calabaza y queso, Fior di zucca (las flores de calabaza en Italia se suelen comer rebozadas; como segundos podrás probar el conejo al estilo ligur con aceitunas Taggiasca, el Cosciotto di agnello cocido al horno; como postres no dejes de probar la Pansarola con lo zabaglione, un buñuelo crujiente servido con zabaglione caliente, el Cubaite, un postre de origen árabe que son dos cápsulas crujientes llamadas «negie» en dialecto, cierran una masa de miel y avellanas. Aquí se recogen las aceitunas Taggiasca que producen un aceite de oliva virgen extra de alta calidad, miel artesanal y vinos típicos de Liguria como el Rossese di Dolceacqua DOC.

Recomendaciones para dormir: podrás descansar en La Casa di Ele, B&B Da Giua, House in the Rock, B&B Da Marta o en La Casa di Jacky.

Recomendaciones para aparcar: podrás dejar el coche en Parking.

Recomendaciones para hacer senderismo: acercarse desde la chiesa parrocchiale di Santa Maria degli Angeli hasta el antico frantoio della valle del Mandancio en tan solo 15 min. Foresta di Gouta en Frasce a 20km de distancia y el Tumulo Preistorico di Pian del Re de tan solo 5 km. Itinerario Apricale – Dolceacqua. Parco Naturale delle Alpi Liguri. Sentiero delle Meraviglie que está rodeado de olivos y flores silvestres.

Recomendaciones para visitar en los alrededores: podrás acercarte a poblaciones como Baiardo, Dolceacqua, Pigna, Perinaldo e incluso ciudades como Imperia o Savona.