Montegalda está enclavada a los pies de un pequeño grupo de colinas, aislados por las Colli Euganei y las Colle Berici, en la frontera entre Vicenza y Padova y siempre ha desempeñado un papel estratégico en el eje fluvial del río Bacchiglione. Destacan los palacios y las prestigiosas villas, entre las que, además del castillo, sobresale la villa Fogazzaro, donde se encuentra el Museo Colbachin delle Campane, con su espléndido parque. No te pierdas la Strada Pelosa (que se cree en la hipótesis de que se trata de una antigua calzada romana), una recta larga entre Montegalda y Padova, cuyos dos extremos ofrecen vistas al Castello Grimani y el Duomo di Padova. La economía de Montegalda está principalmente vinculada a la agricultura y la ganadería.
El Castello Grimani – Sorlini fue construido entre los Ss. XIII y XVI sobre una colina salpicada de olivos. Su estilo longobardo y fue reformado en el S. XVIII convirtiéndose en una villa residencial siendo también afrescado Po reconocidos pintores locales. La «Guerra di Montegalda» se libró bajo sus muros con figuras destacadas de la historia medieval: los Scaligeri, Cangrande della Scala y Ezzelino III «il tiranno». Las imponentes murallas, coronadas por almenas gibelinas, envuelven el encantador patio interior, marcado por un pórtico adornado con preciosas estatuas. El castillo tiene forma de anillo alargado, delimitado por tres torres cuadradas y una estructura rectangular, también en forma de torre, que completa su cola. Mientras que los muros exteriores tiene una forma ligeramente redondeada, el patio interior es una gran plaza adornada con una logia de estilo clásico. Se accede a él a través de un puente que se encuentra exactamente en la posición del antiguo puente levadizo. Las elegantes estancias interiores conservan frescos de Andrea Urbani, paisajista y decorador veneciano del S. XVIII, y estatuas del escultor Orazio Marinali, escultor vicentino, además de muebles y objetos de prestigio que evocan un rico pasado. Está rodeado por un Giardino all’Italiana (que destaca por sus precisos diseños geométricos, caminos blancos dispuestos alrededor de esculturas, y fuentes de piedra encerradas por el perímetro de cuidados parterres) y un Parco all’Inglese. La explanada frente al Castello, conserva la imagen veneciana de un «lugar de delicias», con las estatuas esculpidas por Orazio Marinali que adornan los jardines y el patio interior, y la logia de estilo y época palladiana. Se accede a él a través de una «puerta florida» que conduce a la avenida central, hasta el bosque de almeces y encinas que forma la «plaza verde» al final. El jardín, concebido a finales del S. XVII aunque conserva las características del jardín de las delicias, al que se suman grandes macetas con limones, colocadas en los intersecciones de los parterres o a lo largo de los senderos, sigue también la tradición toscana. En definitiva, es un armonioso conjunto de invernaderos, terrazas y parterres de todo los tamaños que se integran en el territorio. Aún se pueden ver los restos de la Torre de era romana que se alza en el centro del patio del castillo y que servía para observar las afueras del imperio. Todavía pertenece a la familia Sorlini y no se puede visitar.
Son dos las iglesias que ver en Montegalda: la antica chiesa y monastero di San Marco y la chiesa arciprestale di Santa Giustina.
La antica chiesa y monastero di San Marco está situado en la cima del Monte Merlino y fue construido en el S. XV. El complejo (iglesia, campanario y convento) es de origen gótico y alcanzó su esplendor en el S. XVI gracias a la familia Vicenza Chiericati. En 1629, dentro de la iglesia, se construyó la capilla dedicada a San Valentino y, entre finales del S. XVII y principios del S. XVIII, se amplió el ábside (conserva un precioso retablo de 1606 de Alessandro Maganza, con la Trinidad, el río Bacchiglione y las Colli Euganei al fondo) y se rehizo la fachada. En su interior destaca la Madonna Nera que amamantando al Niño Jesús y es considerada una pieza preciosa. Desde 2005, el monasterio alberga a las monjas benedictinas cistercienses.
La chiesa arciprestale di Santa Giustina fue construida antes del año mil y fue iglesia parroquial hasta 1950. Conserva numerosas obras de artistas locales, entre ellas, un retablo del pintor Maganza.
Las villas que ver en Montegalda son: la Villa Fogazzaro – Colbachin y su Parco, la Villa Giarolo, la Villa Scroffa Cattelan, la Villa Feriani y la Villa Gualdo.
La Villa Fogazzaro – Colbachini fue construida en el S. XV y es una de las residencias más elegantes de Montegalda, con su jardín a la italiana y su parque romántico. Junto a la residencia se construyó también un oratorio, que hoy alberga un precioso retablo del pintor vicentino Giovanni Busato. Fue ampliada en 1846 por el arquitecto Antonio Caregaro Negrin, por encargo de la familia Fogazzaro,y hoy alberga el Museo Veneto delle Campane. Don Giuseppe, tío del escritor Antonio Fogazzaro, era un gran aficionado a la botánica; es por ello que inició las obras de ampliación del parque de Villa Fogazzaro, que hoy alberga, además de especies autóctonas, una variedad de plantas exóticas raras: el tejo (uno de los más importantes del Véneto), el calocedro y la sófora japonesa. Antonio Fogazzaro construyó en el Monte Roccolo la «Specola», un observatorio astronómico de estilo Liberty, para su hijo Mariano, así como una pequeña torre para la caza, el «Roccolo», y el monumento dedicado a su tío Luigi Fogazzaro, aún bien conservado.
El Museo Veneto delle Campane, también llamado Muvec, forma parte de la Fondazione Museo Veneto delle Campane Daciano Colbachini. El museo fue inaugurado en marzo de 2002. La colección rinde homenaje a la centenaria tradición empresarial de la familia Colbachini (actualmente IVG Colbachini S.p.A), que comenzó en 1745 con la fundación de campanas. La rica y valiosa colección, que reúne más de 200 campanas producidas por diversas familias de fundadores, procedentes de Europa, China, Tailandia, India y Ucrania, a lo largo de un período que abarca desde la época romana hasta la actualidad, se complementa con una intensa actividad educativa y una programación cultura. Al inicio del recorrido del museo, en el encantador patio, se encuentran las campanas más grandes. En el interior, en un espacio de 400 m2, se exhiben más de doscientas piezas en cinco salas cuya peculiaridad reside, además del amplio periodo documentado, en la variedad de orígenes. En la primera sala, titulada «Dalle campane cinesi all’età moderna», se exhiben gong chinos decorados con ideogramas auspiciosos para recordar los antiguos orígenes de las campanas: la «patente» china data de alrededor del año 2000 a.C. También se exhiben artefactos indios, birmanos, tailandeses y algunos espléndidos italianos, incluyendo campanas de forma gótica que datan del S. XI. El recorrido continúa en la segunda sala, que recuerda la historia de los fundadores venecianos, donde se exhiben algunos de sus artefactos: campanas y campanillas fabricadas por las fundiciones De Maria de Vicenza, De Poli de Ceneda-Vittorio Veneto. Cavadini de Verona y, sobre todo, Colbachini, activas primero en Bassano del Grappa y luego en Padova. El mundo de la navegación también ha hecho un amplio uso de campanas y campanillas: algunos artefactos de origen europeo, utilizados en barcos, barcazas y embarcaciones, se recogen en la tercera sala. La cuarta sala reúne todas las variantes posibles que han llegado hasta nosotros de tintinábulos, morteros, cencerros, campanas y batole. Finalmente, una Fundición Estática ilustra las fases que atraviesa el método tradicional de fabricación de la campana, desde el modelo de terracota hasta el objeto terminado. Pero no es solo una sala de exposiciones; su extraordinaria acústica se ha visto enriquecida en los últimos años por elegantes y refinadas recitales de música clásica interpretados por artistas de algunas de las instituciones musicales más importantes de Europa.
La Villa Gualdo fue construida en el S. XVI. Es la actual sede del Comune y alberga una exposición permanente dedicada al escritor Antonio Fogazzaro inaugurada en 2011, donde encontrarás numerosas primeras ediciones autografiadas, artículos y hojas de periódicos antiguos, carteles y fotos únicas de Fogazzaro y su familia en su villa de Montegalda. Aquí podrás descubrir los orígenes y las actividades del escritor, las mujeres más importantes de su vida, su compromiso con los dramas sociales de la época, su delicada relación con la iglesia y su amor por la belleza del paisaje vicentino.
Por último, comentar que el Porto y la Conca di Navigazione, son un interesante ejemplo de ingeniería hidráulica.
Recomendaciones de eventos: la Fiera di San Marco se celebra a finales de abril y se conmemora el martirio del santo patrón de Venecia; la Festa del Baccalà se celebra a principios de octubre; Santa Giustina se celebra el 5 de octubre.
Recomendaciones para comer: podrás probar los platos típicos del Véneto en Trattoria Da Culata, Trattoria Stella d’Italia, Trattoria Tre Scalini, Agriturismo al Contadino o Pizzeria Mancino.
Recomendaciones para dormir: podrás descansar en Agriturismo Il Palazzone, Fattoria Grimana o en Bed & Breakfast Miotto.
Recomendaciones para aparcar: podrás dejar el coche en Parcheggio Piazza Generale Dalla Chiesa, Parcheggio Pubblico «Vía Rossini», Parcheggio «Vía Brunello», Parcheggio Pubblico «Vía Verdi», Parcheggio Vía Vivaldi.
Recomendaciones para hacer senderismo: una via ciclopedonale entre Montegalda y Longare que sirve para conectar con la antigua ciclovia ferroviaria Vicenza – Noventa. La Via Ciclopedonale Cervarese – Montegaldella – Longare. El Sentiero Fogazzariano. La Green Way «Fogazzaro Roi». La Strada dei Vini dei Colli Berici.
Recomendaciones para visitar en los alrededores: podrás visitar lugares como la Villa Feriani en Colzè, recorrer poblaciones como Longare, Abano Terme, Bassano del Grappa o Cittadella; e incluso visitar ciudades como la bellísima Venecia o Vicenza.