Lendinara es una población que pertenece a la provincia de Rovigo, en Veneto, y a la que se la distingue con el nombre de la «Atene del Polesine». Está situada en el canal del Adigetto, antaño era un puerto fluvial muy activo. Y es que son numerosos los palacios nobles, símbolos de la riqueza de la ciudad y de sus familias, que la salpican y la embellecen. Es, además, destino de peregrinaciones. Su historia fue importante durante la Alta Edad Media en el S. IX y también durante el S. XIV, objeto de disputas entre la familia Este y los Carraresi. Y un siglo más tarde llegó a convertirse en un centro cultural y artístico muy desarrollado. Lendinara es también la ciudad de los Canozi, es decir, los incrustadores de madera fina conocidos en toda Europa, así como la cuna de Domenico Montagnana, gran luthier del S. XVIII, constructor de instrumentos musicales muy famosos como violas y violonchelos.
Los edificios religiosos que ver en Lendinara son el Duomo di Santa Sofia, el santuario della Beata Vergine del Pilastro, la chiesa di San Biagio recientemente restaurada a su antiguo esplendor, la chiesa di Santa Anna y la chiesa di San Rocco.
El Duomo di Santa Sofia fue construido en 1070 sobre un templo pagano anterior, encargado por la noble familia Cattaneo di Lendinara. Se cree que fue dedicado a esta santa como homenaje a Sofia Lendinara, esposa de Obizzo d’Este. Está embellecida por un altísimo campanario (de 92 m de altura es, de hecho, el segundo más alto del Veneto y el noveno de Italia) que fue construido entre 1792 y 1824 y donde en su cima podrás observar una veleta de madera en forman de ángel, recubierto de cobre que fue alcanzado por un rayo en 1973 y sustituido por una copia. En su interior se conservan numerosas pinturas de gran valor, de las cuales la más famosa es la «Madonna col Bambino e angelo musicante» de Domenico Mancini, alumno de Giorgione, que data de 1511, además de ricos altares de mármol y una serie de estatuas en su gran interior. También hay pinturas de Pietro della Vecchia y Antonio Zanchi.
El santuario della Beata Vergine del Pilastro fue construido a finales del S. XVI y fue reformada en el S. XVIII, pero su historia comienza mucho antes, cuando ocurrieron una serie de milagros relacionados con la estatuilla: el primero fue después de una noche tormentosa, cuando la estatuilla, arrancada por la fuerza del viento del nicho en que estaba colocada, fue encontrada, rodeada de un fuerte resplandor, en un seto cercano. Durante la construcción del primer santuario se utilizó agua de un manantial cercano, que durante las obras se transformó de agua clara en agua de color rojo sangre. Con el paso de los años, este manantial se convirtió en destino de peregrinaciones gracias a sus propiedades milagrosas que curaron a muchos enfermos. Su interior alberga una estatua de la Virgen tallada en madera de olivo. Hoy el santuario es visitado por miles de fieles y está confiado a los monjes benedictinos de Monte Oliveto.
La chiesa di San Rocco fue construida en 1516 y surge en las afueras de la ciudad, en la carretera que conduce desde Lendinara hacia Rasa. Fue en agradecimiento a San Rocco por la salvación de la peste de 1511. En 1535 la familia Contarini asumió la tarea de renovarla. Hoy en día la iglesia es propiedad del Comune que decidió utilizarla como capilla en memoria de los caídos en la Primera Guerra Mundial. A la derecha, podemos detenernos ante el imponente plátano (plantando en 1848) conocido por los lendinareños como alboron de San Rocco.
Son dos las plazas más importantes que ver en Lendinara: la piazza Duomo y, a 400 m de ella, la piazza Risorgimento. Esta plaza es muy particular porque está dominada por un lado por el palazzo Pretorio (uno de los más antiguos) y las Prigioni, construidas a finales del S. XIV como castillo bajo el dominio de los Este y posteriormente utilizadas por los venecianos como lugar de detención. La torre aún domina la plaza y tiene 25 m de altura. Muy cerca se encuentra el Municipio, construido también en época Este y frente a él, la colonna con il Leone di San Marco, el símbolo del dominio veneciano sobre la ciudad, además de la Torre Civica o dell’Orologio. No te pierdas el pórtico de columnas del S. XIV, el histórico Caffè Maggiore de 1915 y un par de torres del S. XIV (Torre Maistra) que pertenecieron al castillo d’Este construido en el S. XI.
La Torre Civica o dell’Orologio fue construido en el S. XVII y estaba equipado con un reloj y una campana que todavía suena a todas las horas del día y de la noche.
Otros palacios que ver en Lendinara son el palazzo Malmignati-Boldrin con un pequeño Museo dedicado al Risorgimento Italiano y que es la actual sede del archivo histórico del municipio y la biblioteca, el palazzo Perolari y el palazzo Ca’ Dolfin-Marchiori.
El Museo del Risorgimento Italiano fue inaugurado en 2016 en el interior del palazzo Malmignati-Boldrin. En su interior se conservan documentos y artefactos de este período puesto que Lendinara fue una población que destacó en este tiempo. Además es ciudad natal de Alberto Mario, amigo de Giuseppe Garibaldi y uno de los primeros diputados y senadores del recién formado Reino de Italia. El Museo se puede visitar durante todo el año con reserva previa.
El palazzo Ca’ Dolfin-Marchiori fue testigo absoluto de la presencia noble y se cree que fue construido gracias a un diseño de Vincenzo Scamozzi. Tiene un parque del S. XIX diseñado por Giuseppe Jappelli, un enorme parque privado caracterizado por su estructura de giardino all’italiana y situado en el corazón de la ciudad que se puede visitar en días concretos del año o con reserva.
No te pierdas el Teatro Ballarin, que está ubicado no muy lejos de la piazza del Risurgimento, en un edificio construido en el S. XV. También albergó los almacenes municipales hasta que en 1812 fue transformado en lo que es hoy día. Acoge una rica temporada de prosa durante el período otoño-invierno.
La zona verde de Lendinara está compuesta por la ribera del río Adigio, llamada Riviera San Biagio y toma su nombre de la homónima iglesia. También está el Adigetto,un pequeño canal que, partiendo de Badia Polesine, atraviesa la ciudad. En estas dos zonas podrás pasear a pie o en bicicleta.
Recomendaciones de eventos: la Fiera di San Marco se celebra a finales de abril y la Fiera di Lendinara se celebra en septiembre con conciertos, degustaciones enogastronómicas y espectáculos.
Recomendaciones para comer: podrás probar los platos típicos del Véneto en Tana del Luppolo, Ristorante Ca’ Pisani, Balobino Lendinara, Pizzeria Trattoria La Casetta, Officina 45 o Pizzeria Trattoria Le Fiabe.
Recomendaciones para dormir: no hay alojamientos en Lendinara pero a menos de 5 km tienes B&B da Zio Gianni, Karingo House, Albergo Ristorante Palladio Osteria dal 1900 y Motel Karibe en Fratta Polesine; Agriturismo Le Clementine, La Bussola y B&B Amy&Julie en Badia Polesine; Alla Nave en Masi; y Quo Vadis Qui Vieni en Rovigo.
Recomendaciones para aparcar: podrás dejar el coche en Parcheggio.
Recomendaciones para visitar en los alrededores: podrás visitar poblaciones más pequeñas como Badia Polesine, Fratta Polesine, Montagnana y Bevilacqua o acercarte a ciudades más grandes como Rovigo, Padova o las bellísimas Verona y Venecia.