Cortina d’Ampezzo, la «Perla delle Dolomiti», es uno de los centros turísticos más famosos del mundo, sobre todo gracias a la belleza del paisaje de las Dolomitas que lo enmarca. En el pasado, hasta 1923, se llamaba Ampezzo y está situado en el Val d’Ampezzo, una amplia cuenca bañada por el sol y rodeada de majestuosos picos, entre ellos seis de más de 3000 m. Aquí podrás disfrutar de los deportes tanto en verano como en invierno. Los Juegos Olímpicos de Invierno de 1956 pusieron a Cortina en el mapa.
Una de las calles más importantes de Cortina y su corazón palpitante es Corso Italia: la calle comercial por excelencia. En ella podrás pasearte entre tiendas de moda, galerías de arte, edificios públicos, tiendas de antigüedades, joyerías y escaparates de grandes marcas. En ella destaca la Cooperativa di Cortina, un gran almacén con seis plantas que existe desde 1893, la Librería Sovilla, con su interior de madera, Lovat Pasticceria que también fue una tienda histórica fundada a principios del S. XX y cuyo interior recuerda a una cabaña de madera.
No te pierdas el Museo delle Regole o «Ciasa de Ra Regoles», que consta de tres museos: el Museo Etnologico, el Museo de Arte Moderno «Mario Rimoldi» con una importante colección de obras del S. XX y un Museo Paleontologico «Rinaldi Zardini» con restos fósiles. Se encuentra en un elegante edificio del S. XIX que representa uno de los mejores ejemplos de construcción de la época. El museo está dividido en tres secciones y permite descubrir la vida y la historia de la población rural en los siglos pasados. El visitante podrá admirar las herramientas y objetos de uso cotidiano y los trajes locales del pasado que aún hoy se lucen con orgullo los domingos y festivos. En su día fue el centro de administración del Comune de Ampezzo.
El Museo d’Arte Moderno «Mario Rimoldi» alberga una notable colección de pinturas y esculturas del S. XX, entre las que se incluyen obras de Campigli, De Chirico, De Pisis, Sironi, Guttuso, Morandi, Music, Savinio, Garbari, Depero y Tomea. Todo ello sitúa al museo entre los primeros lugares del ranking de la escena cultural italiana contemporánea. Fue inaugurado en 1974 gracias a las donaciones de Rosa Braun, viuda de Mario Rimoldi.
El Museo Paleontologico «Rinaldo Zardini» es el museo de historia natural de Cortina y alberga la colección privada más importante de fósiles de la formación San Cassiano que data por tanto de hace 220-230 millones de años, en el período Triásico. El museo también ofrece la oportunidad de descubrir la increíble historia evolutiva de los Dolomitas, que surgieron del mar. Aquí podrás admirar conchas de invertebrados marinos, megalodones, esponjas, corales y otros fósiles que atestiguan claramente el verdadero origen de la perla de los Dolomitas. Fue inaugurado en 1975.
Podrás entrar en sus dos iglesias: la chiesa parrocchiale dei SS. Filippo e Giacomo y el Santuario della Beata Vergine della Difesa para la Santa Madre.
La chiesa parrocchiale dei SS. Filippo e Giacomo fue construida en 1775 bajo la dirección del arquitecto M. Promperg-Costa con estilo tirolés. Entre los artistas que contribuyeron a la construcción del edificio se encuentran personalidades como el famoso escultor Andrea Brustolon, los pintores Francesco A. Zeiler, Giuseppe Zanchi y los ampezzo Luigi Gillarduzzi y Giuseppe Ghedina. Alberga algunos tesoros de notable valor como el tabernáculo de 1703, esculpido por Andrea Brustolon y la bóveda con frescos de Francesco Anton Zeiler que representan «Il Martirio di San Giacomo», «La Cacciata dei Mercanti dal Tempio» y «Il Martirio di San Filippo». El campanile, visible desde todos los puntos del valle y símbolo de Cortina, se completó entre 1851 y 1858 según un proyecto de Silvestro Franceschi y tiene 71 m de altura, además de un globo de un metro de diámetro, recubierto de pan de oro y colocado en la parte superior.
El Santuario della Beata Vergine della Difesa para la Santa Madre fue construido en 1475 y consagrado en 1482 como agradecimiento por haber protegido a Cortina de la invasión de los godos. Fue reconstruida en 1743 y contiene interesantes esculturas rococó y frescos de Francesco Anton Zeiler.
Por último tienes el Monumento Commemorativo dedicado a Angelo Dibona, un guía alpino de Ampezzo y pionero de los Dolomitas que está situado en la plaza principal. A él se le atribuyen entre 60 y 70 nuevas rutas. A él están dedicadas numerosas rutas de escalada en los Dolomitas, como por ejemplo el Spigolo Dibona en Tre Cime.
Otro museo que podrás ver es el Lagazuoi Expo Dolomiti, un flamante edificio situado en la cima de Lagazuoi, a 2732 msnm que acoge exposiciones, eventos y conferencias. Esta zona fue escenario de la Grande Guerra. El frente estuvo aquí presente y aún quedan vestigios e historias de esa época, de las cuales, una de las más importantes es la Galleria del Lagazuoi, construida por el ejército italiano para colocar minas bajo las trincheras enemigas.
Una actividad extra es el Funivia e Rifugio Faloria que podrás tomar desde el centro de la ciudad para pasar un día rodeado por la naturaleza y la montaña y maravillosas vistas. Está activo tanto en invierno como en verano y es en esta época cuando podrás realizar varias rutas de senderismo por la cima, aunque en invierno podrás esquiar en una de las numerosas pistas de esquí de la zona. En la cima encontrarás el Rifugio Faloria, mientras que para un aperitivo a gran altura puedes llegar al Ski Bar Vitelli, a unos 15 min de caminata desde el refugio anterior.
No te pierdas el Stadio Olimpico del Ghiaccio, construido para albergar deportes sobre hielo como hockey, patinaje artístico, pista corta, curlling o broomball, así como para albergar la ceremonia oficial de inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno de 1956. Es fácilmente accesible a pie desde el centro de Cortina y es accesible tanto en invierno como en verano con una pista de hielo refrigerada (30×60), servicio de bar, monitores de patinaje, solarium y parque infantil. En la zona detrás del estadio también encontrarás una zona equipada para los amantes del skate.
Recomendaciones para fotografiar: desde la terraza del Rifugio Lagazuoi y para llegar allí podrás subir en el teleférico desde el Passo Falzarego.
Recomendaciones para comer: podrás reponer fuerzas en el Ristorante Ariston, il Vizietto di Cortina o Ristorante Lago Pianozes di Alberti Massimo. En la Guía Michelín tienes el Ristorante Al Camin y con 1* tienes el Tivoli y el SanBrite.
Platos Recomendados: destaca el Casunziei que son raviolis típicos de los Dolomitas.
Recomendaciones para dormir: el entorno de Cortina d’Ampezzo no es realmente barato.
Recomendaciones para aparcar: podrás dejar el coche en Località Verocai, 115 Parking, Parcheggio gratuito con navetta, SeAm Servizi Ampezzo, Parcheggio Libero, y Parcheggio.
Recomendaciones para hacer con niños: no os podéis perder el Parco Avventura Cortina que está rodeado de vegetación con espléndidas vistas de las montañas circundantes y un fácil acceso. Está dividido en diferentes recorrido, en función de la edad y la altura y permite que todos puedan divertirse. Los niños también se divertirán en el Museo Paleontologico «Rinaldo Zardini».
Recomendaciones para hacer senderismo: la Antica Ferrovia que recorre todo el pueblo con preciosas vistas panorámicas y es el paseo más famoso de Cortina. No te pierdas el Passo Dolomitico con vistas impresionantes y acercarte en coche. Una de las excursiones más populares es acercarse al lago Sorapis, una perla entre los lagos alpinos con su inconfundible color turquesa. En Gores di Federa disfrutarás de un espléndido paseo que parte del lago de Pianozes, sigue el Sentiero Gores de Federa sumergiéndote en un mundo mágico de cascadas, saltos y arroyos y al final se llega al Rifugio Federa. También tienes la Ciclabile delle Dolomite, uno de los carril bici más bonitos del Véneto en el que atravesarás paisajes de los Dolomitas y conectarás Dobbiaco con Cortina terminando en Pieve di Cadore. En sus alrededores se puede practicar esquí alpino, de fondo, snowboard, raquetas, trineos, trineos con caballos… Le Tofane (Tofana di Mezzo, Tofana di Dentro y Tofana Terza o Rozes tres majestuosos picos que superan los 3000 m de altura, están atravesados por numerosos senderos y rutas equipadas que ofrecen infinitas posibilidades para caminar, vías ferratas y escalada de todos los niveles. Los importantes Tre Cime di Lavaredo representan una de las atracciones ineludibles de Cortina y sus alrededores. No te olvides del Lago Misurina, que es de origen glaciar y donde podrás tomar el sol en la playa del lago, nadar o dar un paseo en barco, caminar por el sendero de la pista peatonal que recorre las dos orillas. Acércate a las Cascate di Fanes donde podrás caminar por detrás de ella. El Ponte Alto- Ponte Outo es un puente colgante de unos 80 m de altura al que se puede llegar en aprox una hora de camino por el sendero nº 10. Lago di Braies es un centro turístico de montaña en Trentino Alto Adige que se hizo famoso gracias a la serie de televisión «Un passo dal cielo». No te olvides de las Cinque Torri. Se puede llegar a ellos por un bonito paseo cuesta arriba que va desde la carretera que lleva al Passo Falzarego cerca del Rifugio Bai de Done, y llegar primero al Rifugio Cinque Torre y luego al Rifugio Scoiattoli. También se puede en telesilla dejando el coche en la zona de Falzarego (sentiero 425) o el Passo Giau (Sentiero 443). Incluso podrás acercarte al Lago Misurina y al lago Sorapiss.
Recomendaciones para visitar en los alrededores: en cuanto a lagos podrás visitar el lago Misurina, el lago Croda, el lago Braies, el lago Sorapiss y sus aguas turquesa o incluso los laghetti della Prateria Alpina como Ajal, Pianozes, Ghedina o Scin, las Cascate di Fanes. Si quieres montañas no te pierdas las Tre Cime di Lavaredo. o el Parco Naturale delle Dolomiti d’Ampezzo. Tienes poblaciones como Cibiana di Cadore, San Vito di Cadore, Auronzo di Cadore.